Otra temporada redonda de Modern family y ya van 4. Para mi
es de las mejores, por no decir la mejor, comedias que hay actualmente en la
televisión americana.
Esta temporada han vuelto a demostrar que están en forma,
con capítulos donde te carcajeabas hasta el final y con capítulos entrañables
que te hacían soltar alguna lagrimita que otra.
Porque el capítulo final donde la madre de Phil moría con
las cartas, sobre todo con la de Alex, te emociona, donde se ve una familia que
está unida en lo bueno y en lo malo. Y como olvidar el de Phil y Claire con
Haley dándole un álbum de recortes para que se acordara de ellos en la
universidad aunque ya vimos que no duró mucho allí metida y tuvieron que
sacarla de la cárcel. Alex sigue siendo la misma empollona de siempre, pero
ahora también tiene otro interés, que no es otro que los chicos. Y Luke, sigue
siendo el mismo de siempre, la verdad es que Luke parece el pequeño Phil, con
sus ideas locas.
La familia de Gloria y Jay es adorable, y ahora con un nuevo
integrante aún más. Vemos como tienen que lidiar con el pequeño Joe,
acostumbrarse a cuidar de un bebé, cosa que Jay no ha hecho nunca y le ha
llevado varios quebraderos de cabeza, como la vez que se fue al cine dejando a
una desconocida al bebé. Y Manny sigue siendo el mismo romántico de siempre
pero con la peculiaridad de que quiere separarse un poco del manto maternal de
Gloria.
Y la familia de Cameron y Mitchell es genial. Además, la gran
revelación de la temporada, Lily, no se queda atrás y ha dado grandes momentos
cómicos a la serie, como su discusión con la mejor amiga de esta pareja, Sal,
que siguen compitiendo por el cariño de estos. Además Mitchell nos dejo la sorpresa en la season finale de que quiere volver a ser un abogado en los juzgados, ya que vimos ayudando a Gloria con sus problemas pre-Jay en Florida.
Nos dejan otra temporada más con un buen sabor de boca, y
esperáremos a la temporada que viene con las nuevas hazañas de esta gran
familia americana.
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